En este taller, utilizaremos reveladores caseros hechos de material vegetal para crear imágenes sin cámara en película llamados fitogramas. La película se revela químicamente a través del contacto directo. Al igual que en el proceso lumen, esto puede resultar en colores inesperados y a menudo, bellos. Dado que son transparentes, los fitogramas son extremadamente versátiles. Se pueden colorear a mano o dorar, presentar en cajas de luz, imprimir en otras superficies fotosensibles en exposiciones simples o múltiples, o incluso unir para crear películas o videos. Los reveladores fotográficos contienen un grupo de productos químicos clasificados como fenoles. Son ricos en electrones, lo que inicia el proceso de revelado (intercambio de electrones). Muchas plantas contienen fenoles que se liberan mediante una solución de bicarbonato de sodio/vitamina C. Son bastante débiles, pero cuando se añade la energía del sol o luz ultravioleta, las propiedades reveladoras se intensifican. Además, las plantas liberan otros productos químicos que resultan en sutiles variaciones de color, como los muchos compuestos encontrados en plantas aromáticas. Los resultados también pueden variar según el tipo de película utilizada. Se cubrirán todos los aspectos del proceso, desde la creación del revelador, la disposición de la película, la exposición, la fijación y el lavado.